Thursday, January 10, 2008

Julian Barnes - "Arthur & George"

Bajo el barniz de temas aparentemente vanos y trillados -el contrapunto entre dos personajes contemporáneos, el amor y el honor en la Inglaterra post victoriana, la lucha entre el positivismo de la ciencia y el naciente espiritismo, la justicia- noto que he subrayado con un querido lápiz 2B los temas que a mí me importan: la vida, la muerte, etc. Cada cual lee lo que quiere.

Arthur es ConanDoyle, creador de Sherlock Holmes ecléctico y prohombre inglés. George es un humilde descendiente de hindúes. Arthur se cree "inglés no oficial", se siente fuera de su época; George se intuye plenamente inglés, se sorprende de bromas, y niega discriminaciones. Tal como yo leo lo que quiero y rescato lo que quiere, George se niega a entender que lo ven como un hindú. Todos somos otredades.

Julian Barnes establece el contrapunto a lo largo de los años -una especie de Dos Tipos Audaces, con George haciendo de looser- y luego los reúne cuando Arthur juega a ser Sherlock y se debate por demostrar la inocencia de George en los crímenes de los que se lo acusa.

Quedan, entonces, las frases en 2B:
  • "Un niño, una habitación, una cama, cortinas corridas que filtraban la luz de la tarde. Para cuando llegó a describir esto en público habían transcurrido sesenta años. (...) La puerta, la habitación, la luz, la cama y lo que había en la cama: “una cosa blanca, cerosa”. (...) Era evidente que el alma de la abuela había volado al cielo y que sólo había dejado la cáscara en putrefacción del cuerpo. ¿Que el niño quiere ver? Pues dejadle que vea. Un encuentro en una habitación con cortinas. Un niño y un cadáver. Un nieto que, al adquirir memoria, ya había cesado de ser una cosa, y una abuela que, al perder los atributos que el niño estaba desarrollando, había vuelto a cosificarse. El niño miró; y más de medio siglo después el adulto seguía mirando. Qué significaba en verdad una “cosa” -o, para decirlo con más exactitud, qué había ocurrido cuando se produjo el cambio tremendo que transformó algo en “cosa”- habría de ser de capital importancia para Arthur."
  • "Empieza a tener una imagen geométrica de sí mismo, empieza a verse en el medio de un triángulo. Sus vértices son las tres mujeres de su vida, los lados los barrotes de hierro del deber."
  • "Y un día Touie muere. Hace trece años que cayó enferma, nueve que conoció a Jean. (...) Recuerda su sonrisa y su bondad, pero también recuerda que han transcurrido años desde que se puso la mano en el corazón y juró que la amaba. No sólo desde que apareció Jean, sino también antes. Ha amado a Touie cuanto ha podido, considerando que no la amaba".
  • "Y en aquel momento le asaltó la comprensión de que todo el mundo iba a morir (...) Aquella mujer con la sombrilla moriría, y su madre, a su lado, moriría antes, y aquellos niños morirían más tarde, aunque si había otra guerra quizás morirían antes (...) Pero cuando uno está en Hyde Park una tarde calurosa de verano entre miles de seres humanos, era menos fácil pensar que aquella cosa intensa y compleja llamada vida sólo fuese un azar acontecido en un oscuro planeta..."

1 comment:

Daniel said...

No sé Uds. Yo odio los comentarios automáticos trae-visitas. Échele un flit a CresceNet.