Puede ser que cuando el contenido falla atravesemos una pasión repentina acerca de los formatos, y nos embarquemos en ciertas obsesiones estúpidas para preservar a nuestro yo de reales preocupaciones. Puede ser. Pero veamos: la misma palabra "caracter" se refiere tanto al tipo de letra como a la personalidad. Y más: la grafología establece idas y vueltas entre lo que ocurre en nuestra cabeza - nuestra necesidad de que nos entiendan, o no- y la escritura. Y no tanto, porque ahora manda el monitor y no tanto nuestra bonita letra. Y Trebuchet fue catalogado como uno de los diez fonts seguros de la web... porque tiene buena definición en cualquier browser de cualquier PC o Mac.
Todo se complica más si se considera que se llamaba trebuchet a un tipo de catapulta originada en Bizancio y adoptada más tarde por los franceses; y aún más cuando se descubre que el tipo de letra diseñado por Vincent Connare en 1996 responde a una jodita escuchada en los cuarteles de la Microsoft Corporation . La pregunta fue "can you make a trebuchet that could launch a person from main campus to the new consumer campus about a mile away? Mathematically is it possible and how?".
No quiero catapultarme. No aún. Pero cada vez Trebuchet me gusta más.